El amor, enturbiado por las dudas
que un golem insensible ha sembrado
comienza a terminar, ya se ha acabado;
y no ha necesitado mucha ayuda.
Pierde el trabajo, la amada y la casa,
pues las desgracias nunca vienen solas:
de hiel y de amargura son las olas
que campan por su alma, todo pasa.
Desconfianza, pérfido veneno,
circulas por venas de enamorados
trocando el amor por resentimiento.
Y el abandono, que nunca fue bueno,
torna el pecho de Jack en desgarrado
almacén muerto de su sentimiento.
Digo yo, si a la profesora le ha valido una canción al piano como reflexión sobre dos capítulos de un libro, ¿por qué no habrá de valerla esto?